La Cincomarzada debe ser en el parque del Tío Jorge. Así lo ratificaron los 120.000 zaragozanos que asistieron a la fiesta, a los que acompañó un día soleado y un buen parque, totalmente renovado y limpio, con música, ambiente y cuadrillas comiendo. El resultado podría enterrar la idea municipal de hacer rotatorio el escenario cada año. Al final, una gran mayoría de los asistentes y colectivos que animaron la jornada festiva acabaron apostando porque el año próximo la cita vuelva a ser en este mismo sitio.

La FABZ, organizadora de la Cincomarzada, calificó de "éxito total" la celebración de esta edición en el Tío Jorge. "Desde primeras horas de la mañana una marea de zaragozanos disfrutó de una jornada de fiesta, reivindicación y solidaridad, donde el buen tiempo quiso acompañar la vuelta de la celebración a su espacio más tradicional y emblemático", indicaron.

El andador central del parque se llenó de fiesta y reivindicación por parte de peñistas y más de cien colectivos, todo un récord. Pancartas en defensa de la educación pública, en rechazo de la ley del aborto, de lucha por los servicios públicos o de críticas a la gestión municipal.

Bajo el lema general Democracia y libertad, la cita volvió a poner sobre el papel las reivindicaciones de los distintos barrios, pero llevó también un mensaje contra la reforma local, la de la ley del aborto y por la defensa de los derechos cívicos. "La reforma local es un ataque directo a la capacidad de los ayuntamientos, que para el movimiento vecinal han sido fundamentales, al igual que para dar respuesta a las demandas ciudadanas. Las nuevas leyes criminalizan, además, a los ciudadanos en sus protestas y manifestaciones. Y la reforma del aborto nos retrotrae a una situación anterior a 1985", apuntó el presidente de la FABZ, Félix Moreno.

Además de esta filosofía general contra algunas de las reformas legislativas del Ejecutivo de Rajoy, los barrios expusieron sus demandas particulares. Entre ellas, las de San José, como la apertura de la harinera o el rechazo de la unificación de los centros de salud mental. "Las unidades son de los barrios y el traslado no tiene sentido, mucho menos ahora que se acaba de abrir un hospital de día en el Miguel Servet con gente contratada. No han necesitado a profesionales de otras unidades como así justificaban el traslado, así que ahora está claro que es voluntad política hacernos esta faena", dijeron. Ya en el aspecto más lúdico, los ciudadanos pudieron disfrutar de más de medio centenar de barras con bebida y comida, y actividades en el centro cívico.