La plataforma en defensa de la salud mental en los barrios volvió a protestar el pasado 11 de junio contra la centralización de las unidades de salud mental en Zaragoza. El colectivo, acompañado por varios pacientes y ciudadanos, se concentró a las puertas del acceso principal al hospital Miguel Servet para pedir al Gobierno de Aragón "que recapacite" acerca de un proyecto que consideran "inaceptable" a nivel sanitario.

"Que las personas con problemas de salud mental tengan que realizar largos desplazamientos para recibir atención sanitaria significará un retroceso de graves consecuencias. Estos pacientes son los que más cercanía y acompañamiento necesitan", señalaron fuentes de la plataforma. "Esto es un desmantelamiento que no se ha consultado con nadie", añadieron. Sanidad trasladará las unidades de salud mental de los barrios de Torrero, Las Fuentes, Casco Viejo, Casablanca y San José a los centros de salud de Sagasta y Valdespartera.

Por otro lado, desde la plataforma en defensa de la salud mental señalaron que "la intención de ubicar un tercer centro de salud en el Centro de Pablo Remacha es una medida inviable, sin justificación ni criterios médicos". Además, el colectivo añadió que "una vez más no se ha contado con los profesionales que atienden a los pacientes en las unidades, que son quienes conocen la situación".

El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón ya aclaró que el área no se ubicará en el sótano de dicho centro sanitario, lugar en el que estaban los aparatos de radiología que fueron trasladados al Miguel Servet. Sin embargo, Sanidad sigue sin aclarar dónde se instalará dicho servicio y qué espacio ocupará dentro del ambulatorio ubicado en San José.