El concejal de IU y presidente del distrito de San José, Pablo Muñoz, como nuevo presidente del Observatorio Urbano de la Bicicleta, lanzó recientemente una serie de propuestas para invitar a las bicis a circular preferentemente por la calzada. Con ello se conseguiría el doble efecto de incrementar su presencia en la carretera, haciendo la circulación más segura y disminuyendo el conflicto con el coche, y retirando bicicletas de las aceras, donde también pueden surgir interferencias con los peatones.

Algunas de estas medidas ya se han aplicado en Francia y en otros países, como que las bicis por la calzada no tengan que esperar en los semáforos en rojo. Esta medida sería de aplicación para el 80% de las vías de la ciudad (las vías 30) y se podría señalizar de dos maneras: con semáforos ambar especiales para bicis o señales verticales de ceda el paso para estas.

"Esta propuesta pasaría a formar parte de la normativa del ayuntamiento, reduciría siniestralidad y favorecería la fluidez del tráfico", apuntó el concejal. La prioridad de paso en los pasos de cebra sería de los peatones. Muñoz recordó que "en ciudades como Copenhague los tiempos semafóricos son diferentes para bicis y coches" y apuntó otras posibilidades que están ya en práctica en la ciudad de Zaragoza, como los espacios de adelantamiento que hay en el paseo Independencia. El presidente de la Junta Municipal de San José indicó que esta medida "mejoraría la eficiencia en los desplazamientos en bici, reduciendo un 30% el tiempo que se emplea en esperas semafóricas". También añadió que "supondría un incremento en la seguridad, porque incrementando el número de bicis en calzada, el tráfico se apacigua".

Muñoz recordó que IU ya introdujo en el presupuesto municipal una partida de 100.000 euros para educación vial, asunto que tenía previsto debatir en el próximo Observatorio de la Bicicleta, un órgano que, según reconoció, tratará de dar "impulso y audacia", puesto que ahora era un mero órgano de validación de decisiones de Gobierno, sobre todo en lo relativo a la construcción de infraestructuras como carriles bici. "En Zaragoza hay una explosión ciclista y ahora hace falta dedicarle mucha atención a la educación vial".

UN BARRIO 'SLOW'

Además, Muñoz adelantó la creación de un grupo de trabajo en el seno del observatorio para elaborar una propuesta de barrio slow como proyecto "experimental". "Se va a proponer una intervención integral en una zona de Zaragoza en la que el tráfico pacificado no sea la excepción si no la regla general, donde se valore la accesibilidad de las personas con discapacidad, se preserven las aceras para los peatones, se facilite el desplazamiento ciclista y se creen itinerarios peatonales. Dicha propuesta será consensuada entre vecinos, ciclistas, peatones, ecologistas, conductores y personas con movilidad reducida.