Los ciudadanos de Zaragoza pagarán a partir de ahora por separado el saneamiento, por un lado, y el abastecimiento, la recogida de basuras y el reciclaje de los residuos, por otro. Serán dos recibos distintos los que se notificarán aunque eso no se traducirá en un incremento del precio del servicio. Así lo anunció el Gobierno municipal, una medida que obedece más a un cambio en el funcionamiento, tanto en la recaudación y en el cobro de los impagados, que en el efecto que puede tener en los vecinos de la capital aragonesa.

Según explicó el vicealcalde de Zaragoza, Fernando Gimeno, la diferenciación se debe que el vertido es una tarifa y el resto de conceptos son tasas, y esto se traduce en que para reclamar el cobro a los morosos, para unos, los primeros, hay que acudir a la vía civil --o "llamar insistentemente"--, y para las otras se puede optar por el embargo de la cuenta bancaria. Pero juntas es imposible hacerlo.

Pero no es el único cambio, ya que el saneamiento lo seguirá recaudando la sociedad Ecociudad Zaragoza, 100% municipal y que gestiona el vertido en la ciudad, mientras que el agua, la basura y el reciclaje pasará a ingresarlo el ayuntamiento.