Honda Racing Corporation, el departamento de competición de la firma alada, no quiere hacer ruido pero sí reconoce que, ante la temporada más atípica de la historia del Mundial de motociclismo, ha acelerado todos los contactos y planes para no quedarse atrás en los próximos años por lo que hace referencia a sus pilotos punteros. Una vez se ha asegurado la presencia, hasta finales del 2024, de Marc Márquez, el mejor piloto de la última década, trata por todos los medios de completar una escudería, tanto en el equipo oficial Repsol Honda como en el ‘satélite’ del italiano Lucio Cecchinello (LCR), capaz de seguir compitiendo (y ganando) la Triple Corona (títulos de pilotos, constructores y escuderías) cada año.

Pese a que la presencia de Márquez, ganador de seis de los últimos siete títulos de MotoGP disputados, también le ha permitido liderar los campeonatos de marcas y escuderías, lo cierto es que tanto los jefes japoneses, empezando por Yoshishige Nomura, presidente de HRC, como Alberto Puig, Team Manager del equipo y responsable de todas las decisiones deportivas, son perfectamente consciente de que, en estos momentos, el único piloto que tiene contrato para el 2021 es Márquez, ya que tanto el veterano británico Cal Crutchlow (34 años, LCR Honda Castrol), como el japonés Takaaki Nakagami (28 años, LCR Honda Idemitsu) y el joven español Àlex Márquez (24 años, bicampeón del mundo, Repsol Honda) acaban su relación esta temporada.

Honda nunca deja de trabajar

“HRC está siempre pensando en el presente y en el futuro de su estructura, desde las categorías inferiores hasta MotoGP”, ha comentado Puig a El Periódico al ser consultado por sus planes de futuro. “Por las circunstancias que todo el mundo conoce, esta temporada está siendo muy, demasiado, especial y no se está desarrollando por los cauces habituales, lo que nos dificulta a todos reflexionar, no ya sobre lo que ocurrirá este año, que ¡ojalá! podamos tener, al final, un Mundial, aunque sea reducido, porque será interesantísimo, sino sobre el futuro inmediato. Eso no significa, insisto, que Honda, que ha conseguido prolongar su relación con el mejor piloto del mundo, siga planificando el mejor futuro posible para todos sus pilotos y, por supuesto, para la marca”.

Da la impresión que, tras asegurarse la renovación de Márquez, arrollador desde que piso, a los mandos de la Honda RC213V, el Mundial de MotoGP, en el 2013, Honda desea conocer los planes de Crutchlow, que, el pasado año, pensaba ya en la retirada y, ahora, como ocurre con Valentino Rossi (41 años), quiere concederse unas carreras para pensárselo. La situación de Nakagami depende más de Japón y por lo que hace referencia a Àlex Márquez, que ni siquiera ha debutado aún en MotoGP, él mismo bicampeón de Moto3 y Moto2 reconoce, en una entrevista en MotoGP.com, que “la situación no es la mejor para renovar un contrato, porque no he tenido la oportunidad de demostrar qué puedo hacer. Honda siempre me ha transmitido seguridad y creo que cuando tenga la oportunidad iré rápido con esta moto”. Puig ha expresado en numerosas ocasiones su confianza plena en la adaptación de Àlex a MotoGP y esta convencido de que si el Mundial-2020 tiene 10 o más carreras podrá demostrar el potencial que lleva dentro.

Todas las fábricas se mueven

El mercado se empezo a mover por los dos golpes de efecto provocados por Yamaha, al anunciar su renuncia al 'Doctor' Rossi y el ascenso al equipo oficial, en el 2021, del ‘Diablo’ Fabio Quartararo, y por Honda, al renovar, por cuatro años más, a Marc Márquez. Esos dos movimientos hizo que todo el mundo se pusiese las pilas, que Suzuki renovase a su joven pareja, Àlex Rins y Joan Mir, y que Ducati anunciase el ascenso del australiano Jack Miller a su equipo oficial, empezando a poner en duda que el subcampeón del mundo de los últimos tres años, el italiano Andrea Dovizioso, correría con ellos en el 2021. Ducati, dicen, está muy interesada en el joven español Jorge Martín, de 22 años, uno de los pilotos que más gusta a Alberto Puig.

Antonio Boselli, periodista italiano de Sky Italia TV, que se mueve como pez en el agua en el ‘paddock’ de MotoGP, señaló ayer, a última hora de la tarde (19.40 horas), que Pol Espargaró, líder del proyecto KTM, había entrado en los planes de Honda para el 2021. ‘Polyccio’, que se siente muy orgulloso de ser la flecha del arco de la marca austriaca, aún no ha renovado con su equipo. Algo más de dos horas después (22.06 horas) del avance de Sky Italia TV, Motorsport.com informaba que el pequeño de los Espargaró tenía un acuerdo verbal con HRC.

Y es que, hace apenas tres días, el propio Pol reconocía a Onda Cero que "al final los equipos tantean a los pilotos y viceversa; los managers hablan con todo el mundo, incluso aunque no haya interés por parte de la marca, pues eso puede cambiar. Pero, sí, los contactos con Ducati y con Honda. que son las fábricas que, en el 2021, tienen asientos libres, están activados, igual que ocurre con KTM".

La felicidad de los Espargaró

“No tenemos absolutamente nada cerrado con nadie, estamos abiertos a todos, pero Pol, después de regresar, la semana pasada, del test que realizó con Dani Pedrosa en el Red Bull Ring, en Austria, está sumamente ilusionado con esta temporada, por corta e irregular que sea, donde espera conseguir algún podio para KTM”, señalaron fuentes del entorno del pequeño de los Espargaró, que prefiere centrarse en el arranque de este irregular Mundial.

“He visto a Pol muy, muy, ilusionado con la KTM de este año”, explicó ayer su hermano Aleix Espargaró, en una video conferencia en la que participó junto a otros invitados, organizada por el Circuit de Cataluña y presentada por Josep Lluis Merlos. "Le he visto tan ilusionado que le he dicho que este año podremos cumplir el sueño de subirnos los dos al podio. Yo, desde luego, quiero conseguirlo con esta Aprilia, que ha mejorado muchísimo, un montón. Es más, aunque ahora me ofreciesen una Ducati, no la cogería: quiero subir al podio con Aprilia y ‘Polyccio’ quiere hacer lo mismo con KTM, pues hemos trabajado los dos muy duro con nuestras marcas para situarlas en el podio”.