3Volkswagen se apunta al coche eléctrico utilizando modelos ya existentes a los que implanta la tecnología eléctrica. El primero de ellos es el pequeño Up! que llegará a mediados del próximo año y al que seguirá el Golf con las mismas pautas. Con ello, Volkswagen demuestra la viabilidad de sus modelos para acomodarse a la sostenibilidad y seguir apostando por el medioambiente.

Pocas diferencias estéticas hay entre el Up! eléctrico y uno normal. Externamente están las llantas específicas de 15 pulgadas así como las luces de diodos en forma de C, el perfil cromado entre el paragolpes y el capó frontal y el reborde azul del logotipo. En el interior, predomina también el tono azul en las costuras de tapicerías, volante y palanca, en tanto que el cuadro de instrumentos se ha adaptado para incorporar el medidor de carga y el indicador de eficiencia de conducción.

Por lo demás, este e-Up! eléctrico mantiene su configuración cuatro plazas con las mismas proporciones que un Up! convencional, así como la capacidad del maletero, que mantiene los 250 litros ampliables a 923 si abatimos el respaldo trasero. Y es que las baterías de iones de litio, que pesan 230 kilos, se alojan a lo largo del suelo del coche. La toma de recarga va en el hueco que en uno convencional es la boca de llenado de combustible. El tiempo de recarga es de unas 10 horas en una toma doméstica y de unas ocho horas en un cargador mural (wallbox), mientras que en un poste de carga rápida se obtiene el 80% de la carga en 30 minutos.

Diversidad de uso

El motor eléctrico está gestionado a través de una caja de cambios automática de una marcha. Esta ofrece una diversidad de uso a través de tres modos de funcionamiento: Normal, Eco y Eco+. Con el primero el motor rinde 82 CV, con el segundo 68 y con el tercero 54 . La autonomía puede llegar como máximo a 160 kilómetros . Sin embargo, este e-Up! tiene también otra particularidad, y es que cuando el cambio está en posición D se puede disponer de tres funciones de frenada regenerativa y también una mayor capacidad de retención pasando la palanca a la posición B. La suavidad de funcionamiento es total y, a diferencia de otros coches eléctricos, no hay que tener constantemente el pie sobre el pedal para desplazarnos.

Volkswagen asegura que con las tarifas actuales de electricidad, el precio de 100 kilómetros sale a 2 euros. Quizás eso anime a desembolsar los 26.300 euros que cuesta, sin las ayudas estatales.