Maserati ha representado lo máximo entre las marcas transalpinas desde que nació en 1914. En los últimos 50 años, uno de sus modelos más representativos en cuanto a lujo y diseño, sino el que más, ha sido el Quattroporte, su berlina de gran tamaño pensada no solo para ir al volante sino también como pasajero y con chófer.

La sexta generación mide 5,2 metros de longitud y para ser una alternativa todavía más interesante a los buques insignias de las marcas alemanas de prestigio, como son el Audi A8, el BMW Serie 7 y el Mercedes-Benz Clase S, así como a las otras propuestas de similares características que representan el Jaguar XJ y el Lexus LS. Es posible elegir entre dos configuraciones de habitáculo, cuatro o cinco plazas, y ofrece un volumen de 530 litros.

El Quattroporte está disponible con un motor de gasolina V8 de 530 CV y un V6 de 409 CV, ambos diseñados por Maserati Powertrain y fabricados por Ferrari. El motor diésel es un V6 de 3.0 litros y 275 CV. Todos los motores van asociados a una transmisión automática de ocho velocidades ZF y la tracción es al eje trasero. La variante V6 de gasolina también se ofrece con tracción total. La versión V8, que tiene dos turbos en paralelo, cuenta con dos programas de funcionamiento: Normal y Sport. En este último, el propulsor responde antes a las órdenes sobre el acelerador y hace que el sonido que sale por el escape sea más grave.

Para rebajar consumos, emisiones y ruido, el Quattroporte dispone del sistema increased control and efficiency (ICE), que rebaja la respuesta al acelerador, anula la función overboost del turbo, suaviza y ralentiza la acción de la caja de cambios y mantiene cerradas las válvulas que hay en el escape en el modo Sport por debajo de 5000 rpm, ya que estas son las responsables de que el sonido del motor sea mayor.

Puede tener un equipamiento muy extenso, incluyendo elementos como cámara de visión posterior, llantas de aleación de 19 o 20 pulgadas, sistema multimedios Maserati Touch Control con pantalla táctil de 8,4 pulgadas o unos faros de xenón con iluminación adaptativa y varios programas de funcionamiento: ciudad, autopista y baja visibilidad. El Quattroporte, fabricado en Turín, se vende desde 107.060 euros.