Un total de 33.000 alumnos de Infantil y 65.000 de Primaria comienzan hoy sus clases en Aragón en un curso marcado por el considerable aumento de alumnos, en gran parte por la población inmigrante, y por la ausencia de grandes polémicas. Incluso este año, el Ayuntamiento de Zaragoza ha conseguido acabar a tiempo las obras de mejora en una treintena de colegios que se había planteado antes del verano. Tan sólo es necesario que la DGA vaya solucionando los problemas que plantee la llegada continua de nuevos alumnos en Zaragoza capital y que este curso de transición por la reforma del sistema educativa no tenga tensiones añadidas.