La estafa Idental lo dice todo: Policlínicas franquiciadas que ofertan «precios bajos» y «falsas subvenciones». Publicidad engañosa: «Dentistas con corazón». Sobretratamientos. Dentistas jóvenes bien formados, precarizados en su nómina y derechos y/o como falsos autónomos. Consultas privadas, de calidad con precios altos para la media salarial del país. Colegios profesionales que están más por la mayoría de sus colegiados de la privada que por la minoría de la sanidad pública. Gestores públicos mirando a otro lado, dejando hacer. Pacientes desconcertados ante la apertura masiva de clínicas y de ofertas económicas. Y una sanidad pública dónde la salud oral es excelente en su nivel superior: el servicio de Maxilofacial del H.M. Servet, un lujo para los aragoneses. Mientras en su segundo nivel, la salud oral está cautiva y abandonada; las Unidades de Salud Bucodental (USB) en Unidades de Apoyo de Atención Primaria, los facultativos sin horizontes profesionales (formación, investigación...), sin servicio propio, trabajando aislados cual taifas y con sus facultades profesionales cercenadas.

Una Adminstración Pública donde el buen Plan Bucodental Infantil (PABIJ) deja en manos, preferentemente, de la sanidad privada mediante conciertos DGA/Colegio Odontoestomatólogos Aragón. El último firmado, por cuatro años, el 4 de abril de 2018, Orden PRE/613/2018, donde se cercena aún más a las USB públicas pidiéndoles objetivos imposibles de cumplir dado el organigrama actual (a 45 € niño revisado). La sanidad, pública o privada es cara, pero ¿qué es menos costoso y justo socialmente?: tener a un higienista y un dentista haciendo 20 revisiones/niño/día en un centro de salud o pagar en un día: 45,00€/revisión/niño a 20 dentistas subvencionados. 45,00€ x 20 = 900,00€/día. No lo duden: la gestión pública en exclusividad del PABIJ es una inversión necesaria y más económica que la concertada. Con las carencias actuales de la sanidad dental pública y dado que hay pacientes que por razones económicas son excluidos de la calidad de las consultas privadas tradicionales. Solo les queda y según ingresos: 1.-Si son de Zaragoza, ser atendidos por los servicios sociales del ayuntamiento, siendo tratados en clínicas privadas. 2.- Que mis compañeras trabajadoras sociales del salud, remitan a la beneficiencia de Odontología Solidaria con demoras de un año, o 3.- Acudir a Identales sin escrúpulos.

¿Dónde está la odontología conservadora y la prótesis, sociales para adultos en la sanidad pública?. Recientemente, en el 23 Congreso de la Asociación Europea de Salud Pública Dental Palma/2018; la Dra. Natasha Azzopardi-Muscat, presidenta de la Asociación Europea de Salud Pública, en su intervención apuntó: «hay que introducir la boca en el cuerpo humano». Cierto, puesto que las sanidad pública europea minusvalora la sanidad pública oral; aquí en adultos solo cubre exodoncias y lesiones. Con todo respeto, admiración y cariño para mis compañeros solidarios; es inaudito que en el siglo XXI, en la 5ª economía de la CE, tengan que actuar en su propio país. ¿Y cómo debería ser la sanidad pública oral?: ¿subvencionada y concertada como el PABIJ? o ¿pública, ofertando tratamientos sociales de calidad?. ¿No se ponen prótesis de cadera...?, ¿es un lujo poder comer, hablar correctamente y tener una estética aceptable?. Si además los datos, tozudos aunque silenciados, confirman que la gestión pblica es más económica y eficiente que la privada concertada, ¿por qué concertar?.

Los gobiernos con responsabilidad en sanidad pública, deben repensar y buscar la ampliación de la cartera de servicios del sistema público de salud en el tema bucodental. Hacerlo Universal, en equidad y con medios propios. De momento, Barcelona ha creado un servicio de odontología municipal para usuarios de servicios sociales. Transcribo la última frase del artículo La burbuja dental de Lola Ester: «¿Qué tal si los negociadores políticos incluyen la salud bucodental en la sanidad pública, aunque sea mediante copago?».

*Médico estomatólogo