El propietario del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, tenía previsto iniciar el pasado fin de semana un viaje a Argentina y Perú. Sin embargo, la decisión judicial tomada por el instructor de una de las causas abiertas del caso Plaza, de prohibirle salir de España, con la retirada del pasaporte incluida, le habrá obligado a modificar sus planes viajeros. Ayer, se le vio con aire distendido en las cercanías de su vivienda en la capital aragonesa.