El tan traído y llevado calendario escolar le ha dado algún que otro disgusto a la consejera de Educación del Gobierno de Aragón, pero también algunas satisfacciones. No se lo podía creer Eva Almunia cuando en su habitual playa de la Costa Dorada se acercó a saludarla una mujer. "¿Es usted la consejera, verdad?", preguntó la desconocida. "Pues yo soy una madre aragonesa, y quiero darle las gracias por suprimir las vacaciones que siguen a la Semana Santa". Hubo algunos agradecimientos más, pero los que siguieron ya no le sorprendieron tanto.