El Ayuntamiento va a acometer definitivamente la reforma de los depósitos de Casablanca que distribuyen la práctica totalidad del agua potable de la ciudad. La renovación de estos depósitos es una de las grandes asignaturas pendientes, ya que presentan un estado lamentable en su estructura y en ocasiones también en su contenido, pues la falta de una cubierta los hace muy vulnerables a la contaminación. Por no hablar de las enormes pérdidas de agua que soporta y que son el principal inconveniente, junto con las deficiencias de la red, para que la Unión Europea asuma parte del costo de la traída de aguas del Pirineo a Zaragoza.