TVE estrenó Vicente Ferrer, la película televisiva dedicada a la figura de este jesuita que encontró en la India un sitio donde realizarse. El estreno interesó a dos millones ochocientas mil personas (15%) lo que no es demasiado para el presupuesto que se manejó. Al fin y al cabo, El Intermedio alcanza dos millones y medio con cuatro gatos.

Fue una noche de Amor. Amor con mayúscula. La obra de un iluminado español que lo dejó todo para ayudar a los pobres. Y como esa vida es dilatada, era incuestionable que no cabía en menos de dos horas. Aún así es plausible que las productoras españolas se atrevan con estos retos. Esto no es la tele yanqui, pero vamos aprendiendo.

Amoroso es lo que en la puerta de al lado, La 2, celebraban: el 30 aniversario de En portada, una sección de lujo en la tele estatal. 30 años viajando por el mundo para explicárnoslo desde la emoción. Por eso juntaron a un grupo de buenos periodistas como Alfonso Armada, Javier Reverte y esa mujer fantástica que es Rosa Calaf, para saber cómo se hace un reportaje. Hombre, cuando uno puede debutar con una entrevista de dos horas a Fidel Castro, muy torpe ha de ser para cagarla. En portada es un bombón, que supongo yo se cargarán en cuanto puedan, así van las cosas en TVE. ¿El amor lo justifica todo? Yo creo que sí; por eso el abogado de la infanta Cristina apela a esa obcecación pasional para explicar que una enamorada es ciega. Y por lo tanto hay que dejarla en paz. No se me había ocurrido.