La adquisición de un edificio situado en la calle Torrenueva, concretamente el inmueble del número 20, va a permitir finalmente la ampliación del Museo Pablo Gargallo. Ha sido un proceso largo y complicado, que al final ha culminado con éxito. Ahora es preciso no perder tiempo y comenzar a hacer realidad un proyecto largamente deseado. Este centro cultural necesitaba de un mayor espacio --con la casa aneja ganará 600 metros cuadrados-- y ello posibilitará la exhibición de piezas que ahora descansan en los almacenes. El futuro debe traer también un refuerzo en esta apuesta cultural, con un incremento en la oferta expositiva.