El proceso judicial de desalojo de una vecina de Tarazona de la casa de su todavía marido se paralizó ayer por falta de efectivos para poder efectuarlo. Al margen de los trámites jurídicos que deba llevar el caso en el curso de este aplazamiento, porque solo de eso se trata oficialmente, quedó claro ayer que el apoyo a la afectada de Stop Desahucios y medio centenar de personas logró un respiro en la situación de desamparo a la que se veía abocada. Un apoyo social que ha demostrado su efectividad real, a pie de calle, una vez más