Tienen razón los vecinos de El Arrabal de Zaragoza al exigir respuesta inmediata del ayuntamiento tras los efectos de la última tormenta, que se cebó especialmente en esa zona de la capital aragonesa. Cierto es que las tormentas son impredecibles en sus daños, pero el volumen de árboles que han caído en los últimos tiempos en esta zona les permite esa vehemencia en la reclamación. Además, el parque del Tío Jorge acumula afecciones de todo tipo y sería conveniente que el consistorio actuara de forma inmediata.