El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, no quiso perderse los festejos tras la consecución de la Supercopa de España por parte del equipo de fútbol aragonés y suspendió sus vacaciones en el Matarraña por unas horas. Pero su presencia en los actos municipales del miércoles sorprendió hasta a su propio equipo --tanta sorpresa, que incluso costó encontrar un equipo de sonido--. Sólo así se entiende que el gabinete de prensa, a las 13.30 horas, informara que el Real Zaragoza sería recibido por el alcalde accidental, Antonio Becerril.