El paro ¿ha dejado de ser un problema? Si nos fijamos en las cifras de los últimos cuatro años, sí. Pero, si miramos las interioridades, no. Durante estos cuatro años, se han creado en España miles de empleos. Sin embargo, sobre la calidad de los mismos habría mucho que discutir. Unos piensan que es mejor trabajar una semana, incluso un día, que nada. El trabajo temporal, de baja calidad en España sigue siendo abusivo. Las mujeres y los jóvenes lo sufren especialmente, ofreciéndoles la sensación de que siempre están de paso, de que siguen siendo becarios con sus treintas sin chance en los bancos y en las inmobiliarias. Hay por el contrario cosas positivas. La tasa de paro femenina se ha reducido, aunque aún la tasa de actividad de las mujeres no llega a la de nuestros socios europeos. Lo que más falla del empleo es la raquítica relación entre el mundo educativo y el laboral y la falta de educación y creación de posibilidades, de un marco adecuado, para la movilidad geográfica. Mientras la gente siga aspirando a comprarse un piso en donde hemos nacido y muchos estudien lo que nadie demanda, no avanzaremos. *Periodista