El documento político que ayer firmaron en Zaragoza los líderes del PSOE y del PAR, Javier Lambán y Arturo Aliaga, respectivamente, provoca automáticamente un bloqueo a la derecha en Aragón. Porque si el PP todavía aspira a alcanzar la Presidencia del Gobierno de Aragón solo tiene como aliados al partido ultra Vox y, por el momento, a Ciudadanos, que sigue inamovible aún pues prefiere como socio a los populares antes que a los socialistas. Pero lo que parece complicado ya es que el PAR dé marcha atrás. Los 16 apartados ratificados ayer son un punto de partida para la formación de un gobierno transversal al que se podría sumar tranquilamente Chunta Aragonesista (que ya sugirió un pacto similar) aunque hubiera matices, y está abierto también a que la izquierda representada por Podemos e IU accedan de alguna manera para evitar el giro a la derecha de la DGA. Aunque lo más sencillo sería que Ciudadanos se uniera a PSOE y PAR. El documento parece hecho a su medida, es más, ayer mismo dijeron desde el partido naranja que los puntos firmados eran muy similares a los que habían presentado a los aragonesistas. Queda casi una semana para la constitución de las Cortes de Aragón y desde entonces, dos meses para investir a un presidente, tiempo suficiente para que el sentido común impere entre los partidos y, sobre todo, se evite un bloqueo total que suponga encaminarnos a unas nuevas elecciones autonómicas.