Mientras en Zaragoza se intentan despejar, todavía sin resultados, varias incógnitas sobre futuros museos, en Huesca el Centro de Arte Contemporáneo de Aragón tiene previsto abrir sus puertas el próximo otoño. Con un proyecto del arquitecto Rafael Moneo, el espacio, con el impulso de la Fundación Beulas, nace con ambiciones, además de con un incremento presupuestario (con un total de 4 millones de euros, uno más de lo previsto). Pero para significarse en un cada vez más concurrido mapa de arte contemporáneo debe escoger un tema diferenciador, un enganche de peso que haga del proyecto de Huesca un espacio vivo y de futuro.
