Más rigor y menos moralina. Sobre todo más inversión y más trabajo, sino queremos ir en el furgón de cola de la medicina del futuro y obligar a expertos entregados como el doctor B. Soria y su compañero aragonés E. Roche a regalar sus conocimientos a los laboratorios y gobiernos de el mundo, obligándoles a marcharse a trabajar fuera de España.
La primera obligación moral y ética es procurar el bien estar y la salud de nuestros congéneres y no privarles de la esperanza. La mayor riqueza de una persona es la generosidad para con los demás y la comprensión y el apoyo a los que sufren y ante todo el respeto.
¿Hay mayor ética y moral? es cuestión de justicia y sentido común, nada más.
Nadie puede ponerle puertas al conocimiento y el progreso. En el futuro nos pueden hacer falta a cualquiera.
Buscarle solución a la enfermedad y el dolor es un deber y una obligación. --I. Rubio Calvo. (Zaragoza)C
