¡Qué idioma más bonito tenemos, y lo poco que sabemos apreciarlo!

El español, oficioso que no oficial como el castellano, tiene tantas y tantas palabras y expresiones como los mismísimos sentimientos.

El castellano no lo habla igual un andaluz, que un gallego, o un mejicano o un argentino, o un aragonés. Cada uno pone su acento, sus peculiaridades, su gracia, su entonación. Es entonces cuando pasa del castellano al español.

La palabra, signo de unión entre las personas, y el idioma como su mejor instrumento, debería ser uno de los temas más importantes en cuanto a la divulgación de nuestra cultura. Por supuesto que es importante aprender otras lenguas... aprender nunca esta de más.

Pero en vez de que nuestros jóvenes, cada vez más, adopten palabras anglosajonas, que quedan muy bien, pero no dicen nada, los eduquemos en el conocimiento de nuestro idioma, y en la buena utilización del mismo.

Así sea, y en español nos lo contemos.

--Javier Gómez Calvo (Zaragoza)C