Cada novedad en el entorno del Real Zaragoza avanza hacia la suspicacia. Mariano Casasnovas, uno de los empresarios más destacados en las últimas semanas durante la operación de compra del club al propietario Agapito Iglesias, ha visto como el BBVA solicita el embargo de sus acciones recién compradas. No aventura nada bueno para los intereses de renovación del club que uno de los impulsores de la pretendida fórmula para salvar al Zaragoza esté inmerso en situaciones de morosidad. Y en tal situación que opte a la figura de salvador.