Mientras la media estatal de la encuesta de condiciones del vida eleva hasta el 21% el riesgo de los españoles de caer en la pobreza, en Aragón, este dígito se sitúa en el 13%. Una situación que coloca a los habitantes de la comunidad solo por debajo de Asturias, País Vasco, La Rioja y Navarra. Pero la comparativa en positivo sobre la realidad nacional no debería servir de atenuante ante la valoración de una realidad que demuestra que más de uno de cada diez aragoneses ronda una situación vital límite. Conocer los datos debe ser el detonante para implementar medidas que los reduzcan.