Llama la atención la pelea sorda que continúan manteniendo socialistas y populares a cuenta de la tragedia del 11 de marzo. El PP tiene una herida abierta: que perdió las elecciones y no esperaba perderlas, y a partir de ahí viene cuestionando el resultado de las elecciones generales, seguros de que el PSOE las ganó por el estado emocional de los ciudadanos. Los socialistas por su parte están empeñados en negar relación entre los terroristas islámicos y ETA, porque el genial el argumento del PP parece que ha hecho mella en su ánimo.

A veces parece que unos y otros se olvidan de lo fundamental que son las víctimas y sobre todo que un hecho tan horroroso pudiera producirse. En estos meses algunas cosas han quedado claras y es la ineficacia manifiesta de los responsables de Interior que no se enteraron de lo que estaba pasando en Asturias, donde la venta clandestina de explosivos al parecer era tan normal como vender sidra. Hay que preguntar a los ministros del Interior del PP por su ineficacia, porque ellos eran los responsables políticos del ministerio, y esta claro que no estaban haciendo su trabajo bien. Puede que los terroristas islámicos que perpetaron la matanza del 11 de marzo tuvieran relación con ETA, al fin y al cabo todos los delincuentes terminan conociéndose y comprando las armas y el material para sus fechorías a los mismos malhechores. De manera que el Gobierno debe de investigar si ésa conexión existe, y el PP debe dejar aceptar de una vez que ha perdido las elecciones porque así lo quisieron los ciudadanos.

*Periodista