Ahora va a resultar que el PSOE es el culpable de que el Ayuntamiento de Calatayud haya tenido que retirar los 16.000 recibos del IBI que se pasaron al cobro con una subida doble de la aprobada. Una cosa es que los socialistas utilizaran el error del equipo económico para hacer oposición sonora y otra bien distinta que quien ha cometido el error, o sea, el concejal de Hacienda, el interventor y los funcionarios del departamento, se sientan acosados por haber sido descubiertos en un renuncio monumental. El concejal de Hacienda debe asumir el error y las consecuencias políticas del mismo, que las económicas ya las asumirán los bilbilitanos.