En la entrada para asistir al pleno celebrado ayer en el Ayuntamiento de Zaragoza hubo novedades de seguridad. Los informadores que habitualmente cubren la información municipal entran al consistorio por la plaza del Pilar, sin pasar los controles que se establecen para los visitantes y que obligan a acceder por Echegaray y Caballero e identificarse ante la Policía Nacional. Pues ayer, sin saber por qué, todos tuvieron que pasar por el aro.