Así se llama la revista cultural que la Asociación Erial Ediciones edita semestralmente de manera impresa desde el año 2011, algo que se agradece frente a las múltiples publicaciones digitales. El pasado día 11 se presentó en el espacio del Teatro Principal el número 4. La revista nace en una época de crisis generalizada que se ha expandido a sectores tan frágiles como la cultura, sobre todo cuando esta depende de las instituciones, pero no lo es cuando la base, la intelectualidad, los artistas siguen trabajando para que la sociedad avance en el pensamiento, en la crítica, en la objetividad de la evolución. Si esto no fuera posible de ninguna manera, nuestro futuro abocaría a la más absoluta de las desdichas. Mientras el interés de los intelectuales permanezca y surjan revistas, asociaciones culturales que sirvan de plataforma para visibilizar lo que en esencia tenemos, cabe la esperanza del saber, de transmitir ideas; otras formas de entendimiento que pueden hacer visible valores tan esenciales como la creatividad, y ampliar nuestro espacio cognitivo hacia esferas tan tangibles como la expresividad y la libertad. Apuestas como la revista Crisis o grupos como Riff Raff, que también colaboran mutuamente, proporcionan mucho más que una publicación cultural, generan participaciones, eventos donde tienen cabida la ciencia, el arte, la innovación y el apoyo a iniciativas. Esto se hace dentro de la colaboración generosa por sacar adelante un proyecto que prima la independencia, por lo que el esfuerzo es mucho mayor. Ahora que el nuevo modelo educativo provoca un desequilibrio en horas y materias como la educación artística, más que nunca, es necesario este trabajo. Por ello el deseo de una larga vida. Pintora y profesora