La izquierda municipal zaragozana volvió a unir ayer su voto solo para aprobar las cuentas del año. El alcalde Santisteve tendrá a partir de la semana que viene unos nuevos presupuestos para poder ir ejecutando a lo largo del año y, de alguna manera, irán salvando una vez más los recortes del estado de bienestar que ha aplicado el PP. Solo se unieron para eso porque se volvieron a ver unas diferencias irreconciliables entre PSOE y ZeC, fundamentalmente, y, en menor medida, con CHA. Al menos, la izquierda se da una tregua para que la ciudad siga tirando un año. Pero nada más.