A veces no sabemos valorar adecuadamente los desvelos que nuestros políticos dedican a nuestro bienestar, así que no podemos extrañarnos de que nos consideren unos desagradecidos que no merecemos nada. Por ejemplo, Rodríguez Zapatero quiere dedicarnos el mejor gobierno de los posibles, unos asesores de lujo, lo mejor que haya en el mercado político actual, y para rellenar los puestos a cubrir, está dispuesto a nombrar a quienes en su momento acompañaron a Felipe González. No contento con eso, promete en campaña que el cincuenta por ciento de su futuro Gobierno serán mujeres, y se ha ido hasta Ourense para fichar a las dos últimas. Vienen las elecciones europeas, la circunscripción electoral es única, nacional, y José Angel Biel propone una alianza con Unión Valenciana, que suma votos de ambos partidos y permite más seriamente aspirar a un escaño. Y lo hace, salvando la natural repugnancia que de seguro siente un partido anti-trasvase, como el PAR, de compartir programa electoral con quienes lo defienden ardorosamente, que para eso defienden también a su tierra, pero a su manera. ¡Si es que no sabemos lo que tenemos, por Dios!

*Abogado