La diputada socialista Mariví Broto lleva muchos meses denunciando la demolición controlada de la ley de la dependencia que está realizando el Gobierno aragonés de Rudi. Tiene mucha razón pero a la presidenta y a su consejero Oliván parece darles igual. Cada mes los datos son peores, las personas que están en espera y que no reciben ninguna prestación, aún teniendo la ayuda concedida, aumentan... Aragón ya es donde más ha bajado el número de beneficiarios. Y luego desde el Gobierno del PP se dirá que la asistencia social sigue igual.