Ante las informaciones de EL PERIÓDICO sobre el nuevo modelo de okupación de pisos en el centro de Zaragoza, el ayuntamiento ha decidido hacer un trabajo de campo sobre la conflictividad que genera la usurpación de algunas viviendas vacías. El concejal responsable de Acción Social, Ángel Lorén, ha anunciado que se hará un diagnóstico de la situación para detectar conductas irregularidades. Sin criminalizar a nadie, pero con interés de actuar para resolver un problema que reproduce una situación que ya se vivió en los 90 con el acoso a los alquilados de renta antigua.