En un contexto de bajón generalizado en el turismo, Zaragoza ciudad ha despuntado positivamente este verano, según datos hechos públicos ayer por el concejal Florencio García Madrigal. El aumento, tanto de las pernoctaciones como de las visitas en el día, debe ser valorado muy positivamente y obliga al Ayuntamiento de Zaragoza a intensificar la atención a los turistas. Sea por la llegada del AVE, sea por la mejora en la oferta cultural de los últimos años, lo cierto es que el creciente caudal de viajeros no es todavía suficiente. Una ciudad bimilenaria y con aspiraciones de proyectarse internacionalmente con una Expo tiene que ver en el turismo una interesante vía de ingresos. La prestación de servicios al turista es buena; de ahí el incremento en las consultas atendidas en las oficinas de turismo. Pero para mantener la línea ascendente en un competitivo mercado de ciudades interiores españolas hace falta innovar constantemente.