Con el argumento de que la información «nunca» debe ser un problema, miembros de ZeC se reafirman en el folleto sobre consumo de drogas, rechazando su retirada. Y así los ediles eluden el verdadero problema de esta guía, que no es otro que su accesibilidad indiscriminada. El contenido puede ser adecuado para consumidores habituales, pero nunca para el gran público. La información no es un problema, pero hay que estar preparado para recibirla.H