La Corona catalano-aragonesa no existió. Punto. Lo dicen eruditos con argumentos sólidos. Perdón. Lo llevan diciendo eruditos con argumentos sólidos desde hace muchos años, pero es ahora cuando se escucha su voz. Esto no es nuevo. Viene del siglo XIX. Lo cuenta el profesor Corral en su libro La Corona de Aragón, manipulación, mito e historia. No vamos a desgranar aquí los argumentos, les recomiendo que lean el libro. Lo traigo a colación porque la semana pasada, el Gobierno de Aragón decidió retirar varios manuales de Historia que se usan en nuestras escuelas y en los que aparece el dichoso término: Corona catalano-aragonesa. Ya era hora. Pero tampoco lo traigo aquí por eso. Lo traigo porque el lunes, el Instituto de Estudios Catalanes (IEC) acusó a la DGA de «censura» por retirar estos libros. Está en portada de su página web. Este instituto, creado a principios del siglo XX por un tal Enric Prat de la Riba (suena a rancia burguesía que te mueres) hoy defiende el derecho de autodeterminación de Cataluña, abomina del 155 y apoya con entusiasmo la idea de los Países Catalanes que, no sé si sabrán, pero incluye toda la zona de la Franja aragonesa entre otros territorios que les son ajenos. Bien. Tengo que decir que cuando una entidad tan sesgada como el IEC habla de censura, la parte contraria (Aragón) debería sacar pecho con orgullo. Por fin. Por fin hablamos un lenguaje que entienden. El de las acciones de legítima defensa contra este secuestro de la historia que una parte de Cataluña lleva perpetrando tanto tiempo con impunidad.

*Periodista