La compañía maderera Finsa, con dos plantas en la localidad turolense de Cella, va a realizar una inversión de 75 millones de euros hasta el 2020. Un plan de expansión que permitirá la creación de 50 nuevos puestos de trabajo que se sumarán a los 400 ya existentes en la actualidad. el plan incluye modernización de instalaciones y aumento de la capacidad de producción. Un impulso bien necesario en una provincia necesitada de apuestas de futuro.