El cine español celebró en octubre de 1996 su primer centenario y eligió Zaragoza para conmemorar la efeméride. Meses antes, en febrero, Ramón Perdiguer y otros doce entusiastas del mundo del celuloide se habían adelantado a la fiesta con la creación de una tertulia cinematográfica que se iba a celebrar el último sábado de cada mes. El encuentro nació en las bodegas Perdiguer, de la calle San Pablo, y atrajo la atención de cinéfilos, críticos, escritores, cineastas o simples aficionados.

Este mes se cumplen veinticinco años de aquella primera cita cultural, el germen de una actividad mucho más ambiciosa que no se limita a debatir durante horas sobre estrenos, directores, festivales, el centenario de Federico Fellini, el mejor título de Akira Kurosawa, la elegancia de Cary Grant y Audrey Hepburn, la perfección de 'El hombre que mató a Liberty Valance' o 'Perdición', lo sobrevalorada que está 'La La Land', la gozosa filmografía de José Luis López Vázquez o la eterna injusticia de los Oscar.

Los miembros de la tertulia han dinamizado el cine en Aragón durante estos últimos veinticinco años con numerosas conferencias y exposiciones o la presencia habitual en todos los festivales y foros cinematográficos que existen en nuestra comunidad. Es habitual toparse con alguno de ellos en cualquier sala de cine de Zaragoza. Con el paso del tiempo, unos cuantos ya han desaparecido, como el propio Perdiguer, alma mater de la cita, pero la tertulia se ha convertido en una gran familia de unas cuarenta personas, con Jaime Esaín, Fernando Gracia, José Laporta. Rafael Alarcón, Emiliano Puértolas, Juan Carlos Ajenjo, Roberto Sánchez y otros muchos más, apasionados herederos de una magnífica iniciativa.