Los comienzos de año conlleva subida de precios. En muchos casos sobrepasa la del IPC, esto hace que al consumidor, es decir, a ustedes y a mi, nos cueste más lo que consumimos. El autobús también aprovecha el año nuevo, y no digamos el taxi, que en Zaragoza, precisamente no es de los más baratos. En Madrid, por ejemplo, con el mismo precio se recorren distancias mucho más largas. A todo esto alguna compensación tendremos, suben los precios pero el usuario qué gana, habría que preguntarse. Quizá el autobús pueda ser más puntual y no vuelvan a repetirse las huelgas, que dejan a los sufridos viajeros esperando en largas colas, o aumente la frecuencia para que en horas punta no te sientas cual borrego en camioneta. De momento "el bus te acerca a los libros" que algo es. Como además, se supone que somos gente civilizada, espero que se aprecie esta buena iniciativa, siempre y cuando nos deje el conductor que toma las curvas a 80 y frena repentinamente porque si no, veo las fichas por el suelo, la gente intentando cogerlas, la señora que quiere bajar y es que hay que entender que el bus no es el metro, donde todo es penumbra y ligero balanceo.

*Pintora y profesora de FP