Pese al esfuerzo de la Consejería de Educación en la concesión de becas para la adquisición del material educativo de Primaria y Secundaria, lo cierto es que solo el 15% de estos alumnos tienen ayudas económicas para el material curricular. Las familias insisten en alcanzar la gratuidad de los libros de texto, una medida que se eliminó en el curso 2012-2013. Educación debería acelerar el compromiso adquirido antes de que finalice la legislatura e implementar mientras tanto las medidas ya adoptadas en el préstamo de libros. La enseñanza obligatoria y gratuita debe ser real.