Por segundo año consecutivo, la gala de los Premios Forqué de cine se celebró en Zaragoza. Con una realización impecable y una importante capacidad de atracción de las principales figuras del cine español, la escenificación del evento en la capital aragonesa no solo representa poner el foco nacional e internacional sobre una ciudad muy vinculada al séptimo arte, es, también, una fuerte inyección económica para la misma. Además de la proyección que las figuras del mundo del cine lanzan a las redes sobre las bondades del territorio. Una apuesta meditada y rentable de la DGA.