El levantamiento parcial del secreto de sumario de los casos Pharmakon y Convector ha puesto de manifiesto el alcance de las tramas presuntamente delictivas de farmacias y laboratorios de distribución en España y particularmente en Aragón. Además del lucro que habrían obtenido, los medicamentos desviados provocaron incluso situaciones de desabastecimiento para los pacientes. A medida que se conocen datos, el daño causado parece mayor. No debería repararse en medios para que esta investigación liderada por un juzgado de Teruel llegue hasta el final, caiga quien caiga.