Avanzan los días y las sesiones parlamentarias en las que se podría aclarar cómo se plantea la negociación de los presupuestos de la DGA para 2019, sin que se despejen las incógnitas. Ayer, de nuevo, el presidente Javier Lambán y el el líder de Podemos, Nacho Escartín, volvieron a mostrar que sus sintonías todavía no están maduras. Lambán ofrece tratarlos con el resto de la izquierda la próxima semana y Podemos, pendiente de que se le acepten sus cinco puntos irrenunciables se distancia con una cita que no es específica. La táctica deberá dejar paso a la confianza.