Tras despejarse el horizonte de la planta de Opel en Figueruelas, con la definición del plan industrial y la aceptación de los trabajadores de los recortes pactados, el desarrollo de los contratos a las empresas auxiliares y suministradoras de componentes va tomando forma. La firma Lear, en Épila, ha anunciado que será la encargada de suministrar los asientos para el nuevo Corsa, lo que garantiza el mantenimiento de la plantilla (270 empleados) a partir del 2019, momento en que se temía el cierre. Sin embargo, la posibilidad de mantener el empleo, como ocurrió en Opel, se hace a costa de una reducción de salarios del 3,5% y la congelación de los mismos cuatro años. Trabajo, sí, pero con más sacrificios.