Tenía doce plantas de marihuana en su casa y lo han detenido. La marihuana es una planta preciosa. Y fumarla es un experiencia muy agradable, bastante mas positiva para el organismo humano que un par de wiskis por ejemplo, pero que no reporta ningún benéfico al estado. La madre de un compañero mío la usa para dormir. Gracias a su canuto diario ha abandonado las pastillas legales para el sueño que le dio su medico y que la estaban abotargando. Mi amiga fibromiálgica la usa para conciliar un pequeño sueño reparador que la libera del insomnio, la tristeza y el terrible dolor que esta enfermedad, aún no reconocida, provoca. Incluso, aunque de modo pacato y cobarde, las autoridades sanitarias aragonesas se plantean su posible uso terapéutico en los hospitales. Y fumarla como mero placer es un viaje delicioso para el que no hay que buscar mas justificación. ¿A quien debemos la elección de las drogas que deben ser legales o ilegales? ¿Saben los legisladores la diferencia entre responsabilidad individual y daño colectivo? Me sonroja de vergüenza y estupor que se organice una operación policial contra un chico y sus cultivos caseros de la planta. Legalizad la maría.

*Periodista