El eurodiputado aragonés de Podemos, Pablo Echenique, va a continuar con la política de esta formación de acercarse a la calle abriendo una oficina ciudadana en Zaragoza. Una buena decisión que demuestra las ganas del colectivo de profundizar en su inmersión en la sociedad de cara a próximas elecciones. Esta bien conocer el trabajo que se hace en Europa y poder dar sugerencias, algo que no se aprecia tanto en las otras europarlamentarias aragonesas. Pero el acercamiento a la calle de Podemos no debe cegar a esta formación con mensajes forzados. Hablar de la opresión del Estado ante la protesta pacífica como hizo Echenique puede ser un exceso si se tiene en cuenta que la rueda de prensa del eurodiputado se hizo ayer en la calle Alfonso y con mucha parafernalia de protesta ciudadana. Nadie le impidió nada.