El nuevo presidente de CEOE Aragón, Ricardo Mur, manifestó nada más llegar al cargo su intención de aumentar la influencia empresarial en la sociedad. Pero sus declaraciones criticando la ampliación de los permisos por paternidad o el registro de horarios en las empresas y, en general, los viernes sociales que, dice, merman la competitividad empresarial, tienen una argumentación idéntica a la del ideario del PP (partido en el que militó) y con la que pueden estar de acuerdo los empresarios. O no. La sociedad también quiere influir en los empresarios y en sus organizaciones, como la CEOE, que, por cierto, representa sobre todo a los grandes. Aunque Mur, precisamente, acaba de crear una empresa de 10 empleados.