Ya se están preparando grandes fastos para el jueves, por si sale la Expo 2008. Conciertos, pantalla gigante en la plaza del Pilar, traca de fiestas, este rotativo pondrá la intendencia... Qué emoción. Mejor sería tenerla (la Expo) ya en el saco, pero si no hay rivales, competencia, no tiene gracia, no hay riesgo de fallar, no hay alegría por ganar, todo es plano, demasiados lustros, siglos de planitud. Al menos desde la expo anterior, que está en las estampas, y en algunas calles y plazas, pero que no la hemos visto ni vivido. La Expo ha de ser aragonesa o nada, Zgz sola no puede con todo este empeño, con este empentón, ni Zgz ni ninguna ciudad: la Expo, salga o no salga, ha de ser de todos. El tirón del superevento, desde la misma nominación del jueves, si se produce, ha de servir para relanzar el territorio de punta a rabo.
Esto hay que demostrarlo desde el principio, desde antes del principio, por ejemplo, montando un dispositivo similar en las dos capitales, Huesca y Teruel, o en las ocho ciudades, pantalla, traca de fiestas, concierto, merendola, alegría, jolgorismo. Si sale que salga para todos, que al ser pocos somos más o menos los mismos, más nuestros queridos e indispensables inmigrantes, que estrenan oficinas dignas, ordenadores... Cada día hay más nativos o autóctonos que se preocupan por sus vecinos, empleados y amigos de otros países: cada día hay más gente que se implica en la kafkiana tarea de conseguir los papeles a los nuevos vecinos, que sigue siendo una durísima labor burocrática a la que nunca se le ve el final: hay gente, como don Fernando Moreno, que llama sin cesar a la embajada y al consulado del país africano al que pertenece el emigrante al que trata de ayudar; los problemas no son sólo de aquí, nuestras colas, papeleos y oficinas: son también de los países de origen, que para rellenar un papel obligan a pasar un calvario.
Pues eso, la Expo, si sale, es también de estos amiguitos que mañana estarán en la plaza del Pilar, o en sus teles y radios. Que las autoridades la extiendan a todo Aragón desde ya, desde los fastos previos y emocionantes de mañana, que Zgz sin Aragón no va ni a la vuelta de la esquina porque todo es lo mismo y está mezclado, mestizado, mudejarizado. Y que gane el Zgz de paso. Viva Víctor Muñoz, Miguel Pardeza y sus muchachos.
*Escritor y periodista
