El servicio de Protocolo de las Cortes de Aragón hizo ayer otra demostración de su buen hacer con motivo del almuerzo organizado en La Aljafería a la delegación del BIE que visita estos días Zaragoza para evaluar la candidatura de la ciudad a la Expo del 2008. En las mesas, en el lugar reservado para cada comensal, se colocó además un pequeño plano de situación del resto de los comensales, de manera que nadie tuvo que presentarse a nadie y todo el mundo supo con quien compartía mesa y mantel. Un detalle que debería ser de obligado cumplimiento.