El desarrollo del coche eléctrico obligará a transformar el sector automovilístico de forma importante. Tal será la situación que si la pequeña y mediana empresa aragonesa no se pone las baterías el 75% de las pymes de la comunidad cerrarán en tan solo 10 años. El sector del automóvil se enfrenta a un reto que puede llevar a una drástica reducción de empleo, se hasta el 11% si no sabe adecuarse a los tiempos que vienen. De ahí la importancia que se le está dando desde las instituciones aragonesas, ya que los que mejor estén situados podrán afrontar los cambios que se avecinan.