La iniciativa del Ayuntamiento de Zaragoza que pretendía ofrecer las obras de la llamada operación baldosas a empresas de inserción y centros especiales de empleo, deberá esperar hasta el 2018, tiempo necesario para modificar la ley que ahora la ha frenado, por no ofrecerse a la libre concurrencia. Facilitar los intereses sociales en este tipo de obras va a favor de colectivos que necesitan apoyo y desde luego no impiden que se complementen con el sector empresarial ordinario. Los partidos de la izquierda están de acuerdo en modificar la ley. Solo se resiente el plazo de ejecución.